«El poder de la lectura» puede sonar a frase motivacional para que los niños se animen a leer en la biblioteca. Puede que se quede cojo, teniendo en cuenta que no vas a poder hacer lo mismo que la niña de Corazón de Tinta cuando leas, claro. Pero es algo que los lectores y escritores debemos tener en cuenta
Porque es verdad que los libros tienen poder. Y es muy probable que gracias a ellos podamos hacer del mundo un lugar mejor.
El poder de la lectura cuando eres pequeña
¿Cómo te animaron a leer? ¿Leyéndote cuentos antes de dormir? ¿Leyendo juntos todos los días? ¿Hablando de los libros que ibas leyendo leído?
Cuando eres pequeña y tu contacto con el mundo exterior pasa por tu familia y tu entorno más cercano, tal vez el mundo exterior no sea muy grande. No es culpa de tus padres, ojo. No todos podemos tener familias enormes y poderosas como en Canción de Hielo y Fuego e ir a grandes celebraciones con otras familias de todo el reino con ellos. Hay unos límites.
Por eso seguramente en esa edad tu mundo se reduce a la gente y los paisajes que ves más a menudo. Si vives en una gran ciudad, te será difícil imaginar cómo es la vida en un pueblo. Si todo tu entorno está formado por personas con el mismo color de piel, que profesan la misma religión y tienen ideas parecidas, no se te ocurrirá pensar que hay gente muy diferente de ti en el mundo.
Ahí es cuando entra el poder de la lectura: mostrándote realidades diferentes a la tuya, personas distintas a las que te rodean…
Tal vez tu historia favorita sea una de fantasía, llena de elementos sobrenaturales que no vas a encontrar en este mundo… Pero el autor habrá sabido reflejar algún aspecto de la realidad en ese mundo de fantasía que seguro que te ayuda a comprender mejor tu entorno. Por ejemplo, imagina que eres un niño y tienes un hermano. Tampoco has tenido mucho contacto con las niñas, pero si la protagonista del libro que te estás leyendo lo es… Tal vez puedas ver puntos de vista diferentes al tuyo. Si ese personaje femenino está bien hecho, en lugar de estar construido a base de clichés, puedes aprender mucho.
Por otro lado, la lectura tiene un poder muy grande en estas edades: cuando tus padres te leen siendo pequeña, creas un vínculo positivo en torno a ellos y los libros gracias a ese momento que pasáis juntos. Se crean recuerdos agradables en torno a la lectura y a tu familia y la relación con quien te lee se refuerza. ¡Todo son ventajas!
El poder de la lectura cuando eres adolescente
La adolescencia es una etapa complicada para todos. Empezamos a ser más independientes, pero no nos sentimos seguros para serlo realmente. Queremos ser más mayores de lo que somos, pero nos tratan como si fuéramos más pequeños. ¡O no! O esperan que actuemos de una forma más madura de la que podemos…
En fin, que a veces entre eso y un posible entorno escolar hostil, la lectura puede ser un refugio muy poderoso para un adolescente.
En estos años, el poder de la lectura puede pasar por ser un lugar seguro. Sentirnos, felices, comprendidos y a salvo dentro de un libro es algo muy reconfortante. (No debemos olvidar hablar con nuestra familia o nuestros amigos si algo malo nos pasa, por supuesto).
Es en esta edad en la que empiezas a cuestionarte todo cuando puedes empezar a cuestionarte cosas sobre ti mismo (aunque hay niños que tienen algunas cosas claras desde antes, claro). Si al leer no encuentras referentes en los que verte reflejado, tal vez te resulte más difícil descubrir qué es eso que te ronda la cabeza desde hace un tiempo (como decía Iria G. Parente sobre la bisexualidad en el podcast de Laura Tárraga la semana pasada).
Teniendo protagonistas que no son solo cis y hetero, hay más probabilidades de que más lectores se sientan identificados. ¿O es que alguien sigue creyendo que «la norma» es ser hetero y cis? Eso es lo que hemos consumido en ficción desde siempre, pero no es la realidad. Cada cual es como es y quien es. Somos diversos. Y un gran número de personas no deberían verse representadas como una minoría o ni siquiera aparecer en los libros.
¿Por qué los escritores debemos ser conscientes del poder de la lectura?
Viendo la importancia que un libro puede tener en la vida de alguien a edades tan tempranas, sería ilógico pensar que los escritores no deberíamos plantearnos lo que escribimos. Es cierto que cada uno tiene que escribir lo que sienta, lo que quiera y lo que le haga feliz, pues para eso es su historia. Pero ignorar la influencia que lo que escribimos puede tener en otros es irresponsable.
…Y eso puede llevar a una influencia negativa en los lectores
Ya lo sé: cada uno lee lo que quiere y hace lo que le apetece. No voy a decirte que no leas X libros, pero sí intento llamar la atención sobre algo importante: leer con los ojos bien abiertos.
Hace unos años, After se convirtió en un éxito. Estaba en boca de todos y las redes se llenaron de frases del estilo: «Ojalá tuviera un novio como Hardin». Como profesora, vi a mis alumnas suspirar también por ese personaje.
After es una lectura rápida, hasta donde sé (aguanté medio libro), y eso, junto con la «historia de amor», puede ser un reclamo para los lectores y lectoras. Vale que cada uno lea lo que quiera pero… ¿No sería interesante leer este tipo de libros con las gafas violetas puestas? ¿No sería un buen libro para darnos cuenta de lo que es una relación tóxica y de cómo se romantiza esto en muchas historias?
Los libros tienen poder, pero nosotros también

No quiero que mis alumnas o alumnos se topen con un Hardin y crean que le deben algo. ¡Ni hablar! Quiero que sepan identificar estas actitudes y protegerse ante ellas. Y me temo que eso es algo que solo se puede percibir si te paras a pensar en lo que estás leyendo.
Por otro lado, supongo que habrás oído hablar de la nueva novela que va a sacar J. K. Rowling sobre un hombre que se disfraza de mujer para matar. Ni que decir tiene que tampoco querría que mis alumnos confundieran a una persona trans con un personaje así, y que espero que esta mujer no consiga tener repercusión con un libro que, tras la cara que ha mostrado recientemente, huele a transfobia que tira para atrás.
Pero no desesperemos, puede que la influencia en los lectores sea positiva
Una historia de amistad y apoyo mutuo puede ser algo enriquecedor. Un protagonista que desafía el orden establecido para defender a otros suena bastante bien. Una historia sobre el autoconocimiento y la aceptación pueden ser muy útiles.
En casos así, el lector puede encontrar una forma de sentirse identificado y aprender algo, ¡y eso es genial! Aunque es cierto que es importante representar bien las distintas realidades que queramos incluir, y para eso los lectores beta y los lectores de sensibilidad son muy importantes. E intentar no repetir lo mismo que se ha hecho siempre. Es difícil, pero los que ahora somos adultos hemos crecido con libros y películas que a veces repetían los mismos esquemas y… no creo que las nuevas generaciones quieran ni necesiten eso.
El poder de la lectura puede hacer que las cosas cambien a nuestro alrededor
Un lector que se siente inspirado gracias a un personaje o una historia puede decidir rebelarse contra las injusticias del día a día. O puede tratar de hacer el mundo un lugar más amables para otros. ¡O quizá encuentre una comunidad que hace que el mundo sea más amable para él!
Este mundo es un lugar hostil muchas veces, y todavía queda mucho camino por recorrer para cambiarlo, pero todos los pasos para llegar a ello son importantes. Por eso mencionaba hace unas cuantas entradas las elecciones conscientes a la hora de leer. Leer a diferentes personas y diferentes realidades puede enriquecernos mucho.
Y creo que eso es lo que necesitamos para hacer de este mundo un lugar mejor.
Por eso escribo para hacer real lo irreal y por eso espero que La Ciudad Escondida sea un libro que ayude a crear un mundo mejor. Todo lleva tiempo, pero se trata de no detenernos.
Y tú, ¿cuál crees que es el poder de la lectura? ¿Cómo pueden los libros ayudar a hacer un lugar mejor?